Un día antes
· ¿A dónde voy? ¿Qué incierta maravilla me aguarda? Más que
el señuelo religioso y las dudosas cenizas del apóstol, más que la piedra sarmentosa del románico, más
que el embaucador “The end” de Finixterre…persigo sorber las minucias que cada
etapa me ofrezca, ahorrar velocidad al alma, asumir la costumbre sorpresa del
sendero, recobrar una conciencia milenaria: ser camino.
· Propósitos: no malversas los pasos, burlar lo previsible,
desanestiesar la mirada… hacer camino.
· Alcanzar ese lugar donde descargas el peso de tu origen y
la culpa desaparece.
· Hablar para alcanzar la plenitud del silencio. Caminar
para colmarme de quietud.
· No creer, crear. No durar más, madurar. No llegar lejos,
acercarse.
Larrasoaña-Cizur
· Entrar en el paisaje sin perturbarlo, contemplarlo desde
dentro como un ser ausente.
· Dejar
sólo la huella externa de narrarlo.
· El presente en mis pies.
Cifur-Puente La Reina
· Tumbado sobre la hierba, en el somero jardín del albergue.
Ráfagas de brisa fresca. El melodioso canto de un secreto pájaro sin nombre. La
indecisa caricia del sol…El gusto de las cosas, insignificantes, cotidianas,
gratis, sencillas, verdaderas.
Torres del Río-Logroño
· Hay que ensuciarse de errores para desenmascarar la
verdad. Es preciso enfangarse de sombras para tocar la luz.
· Caminar así día a día, a campo abierto, me convierte en el
que soy.
Logroño-Nájera
· Mirar las cosas como las cosas me miran a mí.
Nájera-Santo Domingo
de la Calzada
· Cada paso es un tejado a dos aguas. Una pierna descubre,
la otra olvida.
Belorado-San Juan de
Ortega
En los demás
veo copiado mi
rostro.
Estoy sin nadie.
San Juan de
Ortega-Burgos
· Placer de madrugar y estrenar el diario silencio de las
cosas.
Calzadilla-Calzada de
Soto
· Caminar es dejarse vestir por lo que encuentras (te
adentras en el campo tan desnudo).
· Caminar es un simple despojarse, deshojarse de certezas y
codicias.
Léon-Villar de Mazarife
Alegra el campo
una triste amapola
en el erial.
Villafranca del Bierzo-O Cebreiro
· Ya en lo alto, me embriago de horizonte. El aire es mío,
soy del aire. El fin del mundo es mío, soy del mundo. Somos en uno mundo, aire
y horizonte.
Samos-Ferreiros
· Es el momento: el camino decide que me vaya.
· Este es un instante perfecto para aprender a no llegar.
· Peregrinar también es saber dejar de peregrinar a tiempo.
· Una vez que he renunciado a llegar, estoy más cerca.
Regreso
· Al final del viaje, siento que he soltado lastre. Me he
librado de rutinarias corazas y pieles superfluas. Menos arropado, soy más yo.
· He sobrevivido con muy poco. Y ese poco ha bastado para
enriquecerme.
· Nostalgia del reto de Santiago, del campo abierto, del
vínculo con el sendero y los peregrinos que nos acompañan.
ummmmmm.... el camino te hace camino, ya lo creo. Cuántos recuerdos me ha traído esta entrada madre mía...
ResponderEliminarGracias majo :) Un abrazo
Estaba seguro que te gustarían esta selección de escritos de Emilio. Porque ¿quién mejor que tú para saborearlos?
ResponderEliminarUn abrazo.
Me parece precioso, al leerlo tengo la sensación que yo también estoy haciendo el mismo camino. Gracias Jose Luis
ResponderEliminarPues sí, Menchu, es lo que consigue Emilio, que al leer sus escritos tengamos la sensación de que estamos haciendo el mismo camino con él. Un abrazo.
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