MÁS ALLÁ DEL EGO. PABLO D’ORS.

El vínculo que se establece en el silencio es mucho más profundo que el que se establece con la palabra. 

 
Solamente cuando ves a los otros ves el yo profundo.

El ego es ese afán de autoafirmación y apropiación que nos caracteriza. 

La sabiduría consiste en vivir desde nuestro centro, desde nuestro fondo. 

Nuestro drama es que vivimos arriba, por no decir exclusivamente, hacia el exterior. 

Menciona a RAMANA MAHARSHI, como el iluminado más grande del siglo XX. 

Es increíble, pero (antes de comenzar la conferencia) no estoy nervioso. A pesar de que aquí me esperan cuatrocientos bonaerenses. Los nervios vienen del ego, que piensa que te van a juzgar. 

Se puede caminar hacia la sabiduría, es decir, se puede caminar hacia que el sufrimiento tenga menos peso específico en nuestra vida. 

Si nos trabajamos a nosotros mismos lo de fuera cambia.

Junto al pensamiento y la acción está la contemplación; mirar, dejarse tocar. 

El error es nuestro principal maestro. 

Es importante reconocer que son nuestros errores. Yo los resumo en dos. El primer error es pensar que estamos solos. 

Cuando uno va caminando hacia la sabiduría y va dejando atrás la ignorancia, cuando va yendo a su identidad más profunda lo que descubre es que estamos profundamente interconectados unos con otros. 

El segundo error es pensar que el mundo es neutro, o incluso que el mundo nos es adverso y que nosotros hemos de luchar contra él para ponerlo a nuestro favor. 

Cuando vas peregrinando hacia tu centro lo que vas descubriendo es que el mundo no te es adverso, ni siquiera es neutro, sino que es probable.

Limpia tu casa y ya verás cómo empiezas a ver más limpio el planeta. 

Si creéis que vuestra pareja os va a dar la felicidad, estáis perdidos. 

A los demás hay que dejarles en paz. Realmente, cuando dejas a los demás en paz los demás te miran con amor y dicen: alguien que no quiere nada de mí, ¡qué milagro! Por fin alguien que me respeta, que me escucha. 

Creo que dejar a los demas en paz, sobre todo los padres a los hijos, es como el nivel sublime de iluminación. 

Sentarse en silencio y en quietud todos los días sin hacer nada más que respirar conscientemente, eso nos limpia y nos hace un bien enorme. Nada hay tan transformador. 

Solamente es espiritual aquello que tiene silencio, hasta el punto de que podemos decir que silencio es espiritualidad. 

Somos apertura. El silencio te va haciendo una persona abierta. El corazón se ensancha con el silencio. 

Hay un manantial del que se pueden sacar cubos de agua cristalina. Quien tenga sed que venga. Muchas gracias. 

Conferencia de Pablo D'Ors: Más allá del ego: https://www.youtube.com/watch?v=mxk3MtsOMxQ&list=LL&index=13&t=3634s