Cómo pasa el tiempo, o mejor dicho, cómo parece pasar el tiempo. Parece que ha pasado un año desde que comencé con este blog y sin embargo sigue siendo ahora.
No hay ninguna deidad externa o interna, sólo la Presencia misma, previa
al tiempo y a la distancia.
No hay ningún pecado, sólo una imaginaria
desconexión de la Presencia.
No hay ningún infierno, sólo el sufrimiento de hoy
y el anhelo de volver a Casa.
No hay ningún cielo, sólo el hecho de recordar hoy
nuestro Hogar.
No hay ninguna autoridad en esta vida, sólo Vida,
estallando como todo lo que es y lo que no es.
No hay cristianos, judíos, budistas, ateos o
agnósticos, creyentes o no creyentes, sólo seres humanos perfectamente rotos,
luchando por encontrar la luz en la oscuridad de ellos mismos. Pero, no hay tal
cosa como alcanzar la luz cuando tú eres la luz, ni tampoco el amor cuando tú
eres el amor; y la división entre el espíritu y la carne, la luz y la
oscuridad, Dios y el diablo, lo sagrado y lo profano, lo santo y lo no santo,
lo inmortal y lo mortal, el ser y el mundo, nunca sucedió, para nada. Y
entonces, la nueva religión (del latín, religare, 'unir') es el descubrimiento
de nuestra intimidad con la vida, una no-separación de aquello que buscamos,
nuestro Hogar, más allá de todos los hogares mundanos.
Jeff Foster
Jeff Foster
No tienes que
cambiar tu religión para encontrar la Verdad. Pero debes estar abierto. Mooji:
Gracias por llenar un hueco en el vacio con estas palabras surgidas del silencio.
ResponderEliminarExacto, no quiero cambiar mi religión que tanto bien me hace. Pero tengo respeto, admiración y curiosidad por todas las otras... todas o casi todas ofrecen lugares para la paz, la meditación y para silenciar las bullas de este mundo tan "ruidoso".
ResponderEliminar¡Felicitar el primer añito y a seguir....!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarLas gracias te las damos a ti Jose Luis por construir una ventana por la que podemos asomarnos dentro de nosotros mismos sin dejar de ver la luz exterior.
ResponderEliminarTu generosidad, tiempo y dedicación lo han hecho posible.
Gracias, Jorge, Luis Miguel y Eder. Lo dicho, vuestros comentarios me animan a seguir compartiendo cosas en el blog. Un abrazo.
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